• Guanacaste cuenta principalmente con proyectos hoteleros en altura
• En el 2013 sólo en San José se reportaron 34 edificaciones horizontales frente a 79 verticales

Cada vez son más frecuentes las construcciones a la altura en el país, una modalidad que ha venido cambiando la imagen de las zonas urbanas y rurales.

Guillermo Carazo, presidente de la Cámara Costarricense de la Construcción, reveló que en el 2010 en las ferias de construcción, el 75% de los proyectos eran horizontales, mientras que en los últimos años se ha dado un giro, en el auge de la oferta vertical.

“En el 2013 el 55% de las construcciones eran horizontales, contra un 44,8% verticales” dijo Carazo. Esta tendencia es muy visible en la Gran Área Metropolitana y particularmente en lugares como San José centro, Escazú, algunos lugares del este y recientemente en Heredia.

Sólo en el caso de la zona josefina, el año pasado se reportaron 34 proyectos horizontales frente a 79 verticales.

Otros lugares más lejanos como Guanacaste no se quedan atrás, aunque van a un paso más lento pero seguro; esta provincia cuenta principalmente con proyectos hoteleros en altura y se espera aumentar el número.

“En el caso de Guanacaste, existen amplios terrenos disponibles, la topografía es plana y culturalmente las personas prefieren la vivienda con un terreno en lugar de un apartamento en un edificio. Sin embargo, hay diversas edificaciones como hoteles de mediana altura, en donde se convierte muy interesante hacer construcción vertical para incrementar la plusvalía gracias a las hermosas vistas guanacastecas”, explicó Aarón Morales, ingeniero y asesor técnico de la Cámara Costarricense de la Construcción.
El crecimiento de edificaciones verticales se debe a las múltiples ventajas que obtienen las personas. “La seguridad, la reducción en el costo de servicios públicos como el agua, la electricidad y la recolección de basura. También se obtienen beneficios económicos al compartir áreas de jardín, piscina y parqueos”, afirmó Marco Urbina, gerente general de Aceros Abonos Agro.

Las residencias y edificaciones de la industria turística son los que más han apostado por este tipo de construcción en los últimos años. No obstante, los primeros fueron proyectos estatales como el edificio del ICE, la CCSS, y el Banco Nacional.

Hace 10 años, lo tradicional eran construcciones de cuatro pisos máximo, hoy está entre los 7 y 12; y se esperan que las próximas sean hasta de 21 aproximadamente.
Según Carazo, para una efectiva construcción a la altura se deben tomar en consideración varias claves, entre las principales: tener una visión ciudad, apostar por el ordenamiento territorial, contar con un plan estratégico habitacional a largo plazo, afianzar una política ambiental, e introducir una agenda público-privado que agilice cada proyecto.

Además para un apto Desarrollo Urbano y a la Altura, no sólo se debe analizar la edificación en sí, sino también los espacios peatonales, la vialidad y resolver infraestructuras para contar con transporte público eficiente.

Los resultados presentados hasta el 2014, se percibe terminar el año con un equilibrio entre ambas modalidades: 50% vertical y 50% horizontal, distribuidos en diferentes zonas del país.