El sector comercio estima que las ventas aumentarán un 5% durante Viernes Negro y Navidad y se estima la creación de 12 mil fuentes de empleo temporales.
El tradicional Viernes Negro se transformó ya no se trata de un solo día, sino de un mes entero de ofertas que dinamizan la economía y distribuyen mejor el flujo de compradores.
Este repunte ocurre en un escenario macroeconómico favorable. A finales de octubre, el Banco Central revisó al alza su proyección de crecimiento económico para 2025, ubicándola en 4,2%, mientras que la tasa de desempleo cayó a 6% en julio, frente al 6,7% del año anterior.
A la par, el Índice de Expectativas Empresariales de la Universidad de Costa Rica muestra un incremento en el optimismo del sector, siendo el comercio uno de los más confiados en el cierre del año.
“Tenemos un fin de año especialmente dinámico. El crecimiento económico proyectado, la reducción del desempleo y un consumidor con mayor confianza generan un entorno favorable para el comercio formal. Esto impulsará ventas, contratación temporal y movimiento en todo el ecosistema comercial del país”, afirmó Karol Fallas, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio de Costa Rica.
Durante esta temporada, las categorías más demandadas serán ropa, calzado, electrónicos y juguetes, según la Cámara.
Por ello, la Cámara de Comercio hace un llamado a los consumidores a priorizar el comercio formal, recordando que “comprar en establecimientos legales garantiza respaldo, garantía y seguridad.