Forman movimiento en defensa del empleo para los instructores de surf locales

Iniciativa aglutina a representantes de las playas Tamarindo, Negra, Hermosa, Avellanas, Guiones, Nosara, Santa Teresa, Jacó, Dominical, Dominicalito y Pavones, entre otras comunidades costeras del país

El poder del surf local se empezará a sentir a partir de hoy cuando un grupo de 87 instructores de este deporte inicie una fuerte campaña de denuncia en contra de extranjeros en condición migratoria irregular que ejercen ese trabajo sin los debidos requisitos que exige la legislación laboral costarricense.

La iniciativa surgió luego de que un grupo de instructores –en su mayoría costarricenses, extranjeros nacionalizados o con la debida residencia en regla- de Playa Tamarindo en Santa Cruz (Guanacaste) denunciara -ante el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), la Municipalidad de ese cantón y la Dirección General de Migración Extranjería (DGME)- que foráneos que se encuentran en el país indocumentados se dedican a trabajar como profesores de clases de surf quitando clientes a los vecinos de esa comunidad y otras playas del país.

Durante los últimos meses en Playa Tamarindo se ha observado que extranjeros que llegan al país con visa de turistas por 90 días una vez vencido ese plazo se quedan en territorio nacional donde empiezan a laborar en la enseñanza del surf, pero sin el permiso del MTSS y también en condición migratoria irregular porque carecen de un permiso para mantenerse en suelo tico.

La situación de competencia desleal de parte de extranjeros ilegales ocasionó que representantes de escuelas de surf debidamente establecidas –con requisitos como patente municipal, registro ante el Ministerio de Hacienda y la Caja Costarricense del Seguro Social, entre otros- tomaran la decisión de crear una gran alianza nacional que integró a casi 90 representantes de playas como Tamarindo, Negra, Hermosa, Avellanas, Guiones, Nosara, Santa Teresa, Jacó, Dominical, Dominicalito y Pavones, entre otras comunidades costeras, donde el deporte de las tablas es uno de los principales atractivos; pero además, genera cientos de empleo en el sector turismo, transporte, hotelería y venta de artículos en tiendas.

Potencial enorme

En el mundo Costa Rica es un país reconocido internacionalmente como una nación que destaca por la belleza de las playas y la calidad de las olas, así como una excelente naturaleza e infraestructura para la práctica del surf que se ha convertido en uno de los grandes atractivos para los miles de turistas que buscan puntos donde aprender a “correr olas”.

La página Visit Costa Rica indica que el país “se ha convertido en uno de los destinos favoritos para practicar el surf a nivel mundial por el fácil acceso a sus océanos y la variedad de categorías de surf que se pueden practicar. Existen cuatro zonas diferentes que son el Caribe y las costas Norte, Central y Sur del Pacífico”.

“Costa Rica, con 1 466 kilómetros de costa en los dos océanos, tiene más zonas para practicar surf de las que puede imaginar. Frecuentemente en las dos costas hay buenas condiciones para la práctica del surf”, señala ese website.

La presencia de extranjeros –argentinos, estadounidenses y de otras nacionalidades- laborando ilegalmente como instructores de surf en las playas del Pacífico y del Caribe ha provocado una caída en los precios de ese servicio de más del 50 por ciento porque normalmente una clase de surf de dos horas tiene un costo promedio de entre $USD 70 y $USD80, mientras que los foráneos al margen de la Ley bajan las tarifas a $USD30 y $USD 40.

Acerca de Surfistas Locales CR

Surfistas Locales CR es un movimiento de la sociedad civil sin afiliaciones político-partidarias o religiosas cuyo fin primordial es luchar en favor de las fuentes de empleo de centenas de instructores costarricenses de ese deporte. Además de ticos está formado por residentes o nacionalizados que cumplen a cabalidad con todas las reglas y normas que exige la legislación para el desempeño de un trabajo digno que contribuye con el desarrollo del país mediante las contribuciones a la seguridad social o tributarias a través de negocios formalmente establecidos