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Agrupación solicita una labor oportuna por parte del Ministerio de Salud y la CNE

El problema viene afectando a las familias que se muestran vulnerables ante las inundaciones

La comunidad pretende eliminar los botaderos de basura que se están dando en Nosara y que afectan directamente a las familias.

La Asociación Cívica de Nosara le declaró la guerra a los botaderos ilegales y a la contaminación de cauces, sobre todo, después de los daños provocados por el huracán Melissa y las fuertes inundaciones.   

Ahora, solicitan una labor oportuna por parte del Ministerio de Salud, el Instituto Mixto de Ayuda Social para las más de 120 familias damnificadas y la Comisión Nacional de Emergencias.

Esta agrupación trata de proteger con todas estas acciones de eliminar la basura no tradicional con el propósito de salvaguardar el Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional. 

Esta es área protegida de 250 hectáreas, de relevancia nacional e internacional, conformada por tres subsistemas ecológicos que trabajan de forma integrada para mantener los procesos naturales, la calidad del agua y los servicios ecosistémicos.

Su conservación es fundamental para la anidación de tortugas marinas y la protección de la biodiversidad costera del Pacífico Norte.

“Nosara no puede enfrentar sola este problema. Necesitamos la acción decidida de las autoridades para detener los botaderos ilegales y la contaminación que están afectando los cauces y el equilibrio ecológico del refugio”, señaló Marco Villegas, director de la Asociación.

La participación activa de la comunidad ha convertido a la zona en un modelo de conservación y desarrollo armónico, con iniciativas que buscan establecer un corredor biológico que fortalezca la conectividad ecológica entre las áreas protegidas del cantón.

En los últimos días se recolectaron 500 kilos de basura y se han presentado innumerables denuncias ante el Ministerio de Salud a las que los vecinos piden con urgencia que se les de curso.

 

 

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