En el proyecto, se invirtieron 100 millones de dólares, de los cuales 50 millones de dólares fueron aportados por el PNUD, y el restante por 12 ASADAS.
Guanacaste es la provincia con mayor afectación, donde han sido consumidas 50 hectáreas del Refugio Nacional de Vida Silvestre Iguanita y 21 en el Parque Nacional Santa Rosa.