También se reducen en 50% el costo de las pruebas necesarias para renovaciones de declaratoria de hato libre de brucelosis a organizaciones de productores
Este miércoles, el ministro de Agricultura y Ganadería, Víctor Julio Carvajal Porras, y el presidente Rodrigo Chaves Robles, firmaron un decreto ejecutivo que elimina una serie de tarifas de servicios de laboratorio que cobraba el Servicio Nacional de Salud Animal al sector productor pecuario y disminuye en 50% la prueba para declarar hatos libres de brucelosis.
Entre otros, se exceptúan los cobros de los servicios de laboratorio cuando el SENASA determine que requiere realizarlos para el ejercicio propio de sus funciones de garantizar que los alimentos de origen animal estén libres de sustancias químicas tóxicas o agentes patógenos para el ser humano, cuando sean parte de investigaciones institucionales o de reconocimientos de estatus sanitarios de enfermedades y para ejecutar convenios y colaboraciones. Asimismo, se elimina el cobro de las muestras de Salmonella en los establecimientos de sacrificio de aves de medianos y pequeños productores.
Además, se cobrará sólo el 50% del valor establecido para pruebas serológicas que sean requeridas para renovaciones de declaratoria de hato libre de brucelosis, en establecimientos de productores asociados a organizaciones con las cuales el SENASA haya firmado convenios de cooperación para la erradicación de esta enfermedad.
El decreto también elimina el cobro por servicios de oficialización o renovación anual de médicos veterinarios particulares para trabajar en programas específicos de salud animal, oficialización de ensayos de laboratorio, auditoría de laboratorios y autenticación de firma en certificado veterinario.
“Con esta medida se cumplen varios objetivos en beneficio de las personas productoras, de los consumidores y del Estado. Por un lado, se disminuyen los costos de producción; se facilita el acceso a mercados rigurosos y mejora la competitividad de la actividad pecuaria. Por su parte, SENASA logra fortalecer el control y supervisión de la inocuidad de los alimentos de origen animal destinados para consumo humano, así como una mayor cobertura y mejor distribución de los análisis de laboratorio a lo largo de la cadena de comercialización y producción, mediante la utilización de criterios científicos basados en el análisis de riesgo, lo que nos permitirá dirigir los muestreos en aquellos alimentos y actividades productivas de mayor riesgo sanitario”, explicó el ministro Carvajal Porras.
En promedio, SENASA realiza alrededor de 5.600 pruebas de laboratorio por año, con un valor cercano a los ₡316 millones.
El decreto establece que quienes no cumplan con los niveles exigidos de inocuidad, o registren rangos fuera de los límites máximos permitidos, deberán cancelar los análisis.