Sigue estando en la agenda nacional, entre las prioridades por Guanacaste. Los avances del Proyecto Abastecimiento de Agua para la Cuenca Media del Río Tempisque y Comunidades Costeras (PAACUME) son cada vez más notorios, y se confirmó que para el próximo 12 de agosto, se hará la entrega formal de todos los diseños y estudios correspondientes a este proyecto, según Patricia Quirós, Gerente del Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara).

Fue hasta el 8 de diciembre del 2017, cuando se otorgó a SETENA el estudio de impacto ambiental y está en análisis para definir si se cumple con la normativa, o si hay que hacer algún ajuste. Con esta viabilidad ambiental, se puede dar continuidad con mayor agilidad el proyecto.

“Luego de la presentación en agosto, continúa todo el trámite de autorizaciones ante MIDEPLAN, Ministerio de Hacienda, Banco Central de Costa Rica, y cumplir con una serie de condiciones ante el Banco Centroamericano, con todo el proceso de negociación.  La misión es tener terminada toda la tramitología a finales del 2018”, dijo Quirós a Periódico Mensaje.

Agregó “Si se requieren condiciones previas adicionales, que demoren más tiempo, se espera a inicios del 2019 tener todo concluido. Desde Senara, seguimos trabajando con temas de factibilidad, de forma paralela, independientemente del proyecto de Ley Lomas Barbudal, que está en la Asamblea Legislativa, en cuanto al permiso o viabilidad ambiental”.

Sólo el estudio de la línea de biodiversidad de Lomas Barbudal se requirió año y medio. Por ejemplo, se debió analizar el comportamiento de la fauna y flora en verano, invierno y zonas de transición. Además, de que se tuvo que hacer un estudio específico sobre el tema de las abejas, una asociación importante en la reserva, que no se podía dejar desapercibido, a cargo de la Organización de Estudios Tropicales, el cual está en manos de Senara analizando la factibilidad.

El PAACUME está conformado por cuatro componentes, los cuales, se han mostrado los avances. La Presa Río Piedras, ya cuenta con el diseño ICE, de 485 m x 295 m, tendrá un  costo de $142 millones de dólares.

Por su parte, el Canal Oeste que trasladará el agua desde el Embalse Río Piedras hasta Palmira, tendrá 55 km de longitud, el cual, se tiene que ampliar y revestir.  Ya se definió el trazo final y se realizó el levantamiento topográfico de 155 kms, desde el Río Piedras hasta el Río Tempisque.

“Senara está concluyendo el diseño final de las obras del canal oeste. Se realizó el inventario forestal de la franja de 60 metros de ancho que se requiere para la construcción del canal oeste. Se están elaborando los planos finales para catastro de las seis propiedades que se requieren adquirir para la construcción del Canal Oeste”, indicó Quirós.

También se realizó un avalúo indicativo de las propiedades por adquirir para la construcción del Canal.

En cuanto al Embalse, se cuenta con la topografía y catastro de 25 propiedades del área y con el evalúo de las mismas.

Para la red de conducción, se realizó el inventario de los propietarios con base a los registros municipales para: definir la lista definitiva de usuarios y asignación de agua; afinar los planos para catastro de las propiedades por adquirir.

Senara está realizando los diseños de las estaciones de bombeo y la red de distribución por gravedad y presurizada.  Se estimó que 18800 hectáreas serán habilitadas con agua para riego de Carrillo, Santa Cruz y Nicoya.

Se identificaron 746 productores, 70% fincas entre cinco y 30 hectáreas, el 11% fincas entre 30 y 50 hectáreas, 19% mayores a 50 hectáreas. Así todos recibirán agua para el 80% de sus fincas. De ellos, 56 son de Nicoya, 197 Santa Cruz y 493 en carrillo.

Maritza Rojas, Coordinadora de Comunicación Ambiental del ICE, expuso que los estudios realizados por esta institución reflejaron 277 impactos para la etapa de construcción como de operación: 29 compatibles, 13 positivos, 145 moderados, 74 severos, 16 críticos.

El ICE empezó con los estudios en enero del 2016 y finalizaron en marzo del 2017; siendo hasta agosto del año pasado, cuando se tuvo el documento final del impacto ambiental, para presentarlo a SETENA.

 “Para nosotros este es un proyecto que incluye la construcción de 300 nuevos canales en los cantones de Carrillo, Nicoya y Santa Cruz, es estratégico con la finalidad de aprovechar el agua que viene del embalse Arenal, esos 500 o 600 millones de metros cúbicos al año que se van al mar, utilizarlos en todo lo que es llevar agua a la margen derecha para diferentes usos como lo es la producción agrícola, lo que es el consumo humano y para lo que son proyectos turísticos”, explicó Rodolfo Peña, diputado de PUSC.

PAACUME necesita la aprobación de una Ley que permita inundar 113 hectáreas de la Reserva Biológica Lomas de Barbudal en Bagaces para así abastecer con agua al embalse Río Piedras. Senara promete compensar la inundación de la reserva comprando terrenos aledaños y ampliando así el área de Lomas de Barbudal a 458 hectáreas, de acuerdo con la recomendación técnica, realizada por la Organización de Estudios Tropicales (OET), entre los años 2016 y 2017. 

El visto bueno de los diputados también es clave para obtener el financiamiento por $425 millones del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).